viernes, 11 de octubre de 2019

Maria Corina Machado: "Todo o Nada"....

*ARTÍCULO MCM en 2001*

*Todo o nada* bit.ly/2ViHbKB

¿Por qué la gente asumió como propio el compromiso Cese de la Usurpación, Gobierno de Transición y Elecciones Libres qué planteó el Presidente Guaidó? Porque la gente está clara que el régimen no va a entregar el poder y que hay que arrebatárselo. Los venezolanos sabemos que éste es un proyecto criminal trasnacional cuyo propósito es exprimir a Venezuela y expandir sus tentáculos por toda la región.


El mantra del presidente Guaidó es una secuencia de acciones estratégicas que no se pueden alterar: Primero debe producirse el “cese de la usurpación”, que significa la salida y el desmantelamiento total del régimen. Si eso no ocurre, no hay transición posible, y mucho menos la posibilidad de unas elecciones verdaderamente libres. Elecciones libres sólo son posibles en Libertad.


Por lo tanto, sacar a Maduro y dejar a los jefes de las mafias judicial, militar y financieras en el Gobierno de Transición NO ES el Cese de la Usurpación. Dejar el monopolio de la fuerza física -sea regular o irregular, el monopolio de la fuerza judicial y el monopolio de la fuerza comunicacional- en las mismas manos corruptas y criminales sería traicionar el compromiso asumido con la sociedad y la claudicación ante el sistema mafioso. Esto representaría convertir la Transición en Cohabitación.


Tener elecciones libres es mucho más que ir a unas votaciones. Para que ellas sean posible, además de derrumbar al ecosistema criminal, el Gobierno de Transición que lo sustituya debe llevar adelante cinco tareas enormes en el tiempo más corto posible:  1. Dar atención urgente a la crisis humanitaria. 2. La estabilización de la economía y de los servicios públicos. 3. La alineación de la Fuerza Armada Nacional, para que recupere el control y la soberanía territorial. 4. La depuración del sistema judicial; y por supuesto, 5. La reconstrucción de un sistema electoral pulcro e independiente, para que puedan votar todos los venezolanos dentro y fuera del país.


Les pregunto, si las mafias siguen en el poder, ¿permitirían que se lleven adelante estas tareas que son indispensables para garantizar una elección verdaderamente libre en la cual su futuro está comprometido? Los venezolanos saben cuál es la respuesta. Por esta razón se ha producido una ola justificada de repudio e indignación a raíz de la aprobación de un acuerdo parlamentario que subvierte lo convenido en la Ley del Estatuto de la Transición aprobado por la Asamblea Nacional y que rige la presidencia interina.


Este acuerdo dice plasmar la propuesta realizada por los representantes del Presidente Guaidó en el diálogo de Oslo-Barbados, y contempla que el régimen tutele lo que sería una parodia electoral, sin que Cese la Usurpación y en ausencia de un verdadero Gobierno de Transición.


Para justificar este acuerdo, hay quienes se dieron por vencidos y dicen que no hay otra opción, “que esto es lo que queda.” Otros propagan una falsa dicotomía, típica del régimen cubano, que pretende obligarnos a escoger entre “la invasión” o “el diálogo apaciguador.” Frente a esto, los venezolanos tenemos que pararnos con firmeza y no aceptar un chantaje más!


Los que nos quieren abrumar con sus falsos dilemas olvidan lo que significó la aprobación del TIAR: La creación de “una red de carácter operacional de autoridades de inteligencia financiera y de seguridad pública para identificar, investigar, perseguir, capturar, extraditar y sancionar a las personas y entidades asociadas al régimen de Nicolás Maduro involucradas en actividades ilícitas de lavado de activos, tráfico ilegal de drogas, terrorismo y su financiación, y vinculadas a redes de delincuencia organizada transnacional“.


La invocación del TIAR es un paso enorme en la ruta del coraje. Para quienes me preguntan qué es fuerza; fuerza es esto, es la activación de un mecanismo que fortalece la amenaza real, severa e inminente que se le planta al régimen criminal.


Fuerza es también la movilización y presión ciudadana; que se convierte en más fuerza cuando está organizada. Fuerza es la denuncia, fuerza es el valioso y admirable testimonio de los diputados de la Fracción 16 de Julio, que se levantaron en contra de un acuerdo que es violatorio -en lo político, jurídico y moral- de lo acordado con la sociedad venezolana.


Hemos llegado a un nuevo punto de inflexión. Hay que optar entre la ruptura y el continuismo, entre la transición y la cohabitación, entre la firmeza y la debilidad, entre la Libertad y el cautiverio. Los ciudadanos ya decidieron y no están dispuestos a que les cambien la ruta. No hay puntos medios. No hay forma de convivir con el mal sin que el mal nos devore. Son momentos de definiciones y nosotros sabemos que o nos jugamos el todo, o nos quedamos sin nada.
2019-10-06

martes, 8 de octubre de 2019

Omar dixit: oportuno y contundente..!!

_Voces de Libertad_
*¡La catástrofe nacional!*
 _Por: Omar González Moreno_

Venezuela sufre la más desgarradora catástrofe humanitaria de todos los tiempos por culpa de la corporación de criminales que se apoderó del poder y de los cooperadores disfrazados de  oposición que obstaculizan su salida.                                        La gravedad de lo que vivimos es terrible, lo que está ocurriendo en todo el país es la destrucción sistemática de nuestro gentilicio; la tragedia ya no se puede medir en índices financieros o en gráficas de economistas, esta realidad se mide en el exterminio de un pueblo y/o su desplazamiento obligado hacia otros  paises, ejecutados de manera premeditada por quienes usurpan el poder y sus complices.    Fascinerosos de toda laya que cometen este genocidio y cooperadores que permiten que avance la destruccion de la patria en manos de ese conglomerado de mafias.
Por ello, la situación no es para seguir con  juegos políticos, para dudas partidistas o para acomodos personales y/o grupales; la fatalidad nos obliga a ser más firmes en las acciones que llevamos adelante para lograr el  prometido cese de la usurpación, gobierno de transición y elecciones libres, tal y como se propuso en enero de este año cuando se asumió el reto de enfrentarse a la usurpación. No hay que cambiar de caballo a la mitad del río, pero tampoco el jinete debe olvidar su historia ni su destino.              Los factores políticos, deben entender de una vez que no podemos seguir perdiendo el tiempo, tenemos que ser más decididos, más categóricos, más firmes en las acciones que llevamos adelante. Hay que parar esta desgracia.
Las pocas instituciones legítimas que quedan en pie, deben hacerse respetar y pedir auxilio internacional lo más rápido posible para frenar el sufrimiento de millones de compatriotas.                                Se ha repetido hasta la saciedad que solos no podemos. Entiéndanlo, los partidos políticos tienen que tener una posición más clara.         No podemos estar jugando a  negociaciones infructuosas y eternas, a cuotas de poder, cuando el Estado está corroído por la usurpación y cuando las instituciones fueron totalmente socavadas por un régimen que engulló, con sus fauces totalitarias, la institucionalidad de la República.
Comprender que estamos frente a una catástrofe humanitaria resulta un compromiso ineludible, igual que asimilar que no estamos peleando contra otro factor político más sino contra organizaciones criminales trasnacionales.        Esta es una lucha de millones de ciudadanos democráticos en contra de una camarilla de bribones  que se conformaron en una mafia integrada por personeros con vínculos con la guerrilla, el narcotráfico y el terrorismo internacional. 
Pareciera que aún hay sectores que no terminan de aterrizar, que no comprenden la magnitud de lo que vivimos en este momento en Venezuela; se percibe  en el ambiente que hay dirigentes políticos que siguen pensando en pajaritos preñados, en elecciones parlamentarias ilegales y en diálogos ficticios.                                              Todos tenemos que entenderlo de una vez que necesitamos sumarnos masivamente a la propuesta de la Ruta del Coraje, tenemos que escuchar y entender el mensaje que diáfanamente nos transmiten desde adentro y desde afuera del país; no podemos tener miedo a pedir auxilio a aquellos demócratas que están dispuestos a ayudarnos.                    Los venezolanos no podemos soportar más esta hecatombe que significa el socialismo  extendiendo sus sucias maniobras destructoras, como una mancha de tinta china,  por mucho más tiempo. Es hora de ser valientes, es hora de mirar la realidad y afrontar los retos que nos demandan las circunstancias actuales.                                Debemos entender que no podemos ser únicamentente espectadores en este drama, que todos tenemos un papel que cumplir para que Venezuela sea una tierra de libertad otra vez y para siempre.

lunes, 7 de octubre de 2019

Entonces Guaidó .. cuando te pones las pilas..!!


Hoy cumpleaños nuestra Lider Maria Corina..!!